En Un Espíritu es un ministerio de alabanza y adoración formado con el propósito de cumplir la gran comisión de predicar el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo hasta lo último de la tierra, unidos en un mismo Espíritu. “Nuestra visión es cambiar la eternidad de las personas, impactando cada ciudad donde vayamos”, señala Claudio Ibarra que junto a su esposa María Castro lideran este proyecto evangelístico. “Dios nos impulsó a armar un equipo con personas de diferentes partes, por eso está integrado por gente de Santiago del Estero, Mendoza, Entre Ríos, Azul, Gran Buenos Aires y Uruguay”.

El cronograma para cada provincia será el mismo, iniciando el primer día con una jornada de 24 horas de alabanza contínua. Al día siguiente, instalarán altares públicos en distintos puntos de las ciudades. Para culminar la tercera jornada con diversas acciones evangelísticas y de ayuda social. “No vamos con ninguna fórmula nueva, como ministerio queremos trabajar a la par de la iglesia local ayudando todos juntos En Un Espíritu”, explica Ibarra. “También queremos ayudar en el área social. Sabemos que la iglesia está muy presente en cuanto al trabajo social, a veces siendo la única ayuda que reciben”.

Como antecedente a este trabajo articulado con las provincias, antes de la pandemia Claudio Ibarra recorrió distintas ciudades de la Costa Atlántica con la propuesta Alive Music Tour que consistió en un escenario itinerante en el que tocaron diversas bandas de música pregonando las buenas nuevas hechas canción. Tiempo después, se realizó una convocatoria abierta a través de las redes sociales para conformar el ministerio con cantantes y músicos de todo el país. En la actualidad, a la visión de los líderes se sumaron Yanina Lawreniuk, Jaquelín Burgos, David Ledesma, Elvis Torres, Martín Sálate, Marcos Pérez, Ariel Quintana, Micaela Morales,  Agustin Lorenzi, Nicolás Cardoso, Ricardo Castaño, María Luz Pedretta y Facundo Nader. 

“Entendemos que cada provincia tiene una idiosincrasia diferente, por eso nos juntamos primeramente con los pastores locales para trabajar en equipo”, agrega Ibarra. “Sentimos una carga grande en el campo social también, y algo que nos afecta directamente es abarcar el área de la discapacidad. Por eso queremos llevar la Palabra a ese sector tan vulnerado, buscarlos y orar con ellos”. Aunque por el momento no está conformado en su totalidad el comité organizativo de cada región, se descuenta la participación de iglesias y organizaciones locales. De este modo, En Un Espíritu prosigue con la misión de conectar a cada persona con el corazón de Dios a través de una entrega genuina.

Redacción: Marcelo Bellotta