Mariano Allende aparece en escena con una emotiva canción

Mariano Allende es hijo del recordado Oscar Allende, aquél que nos deleitara desde el bajo en la mítica banda Pueblo de Dios, acompañando a Rabito durante su primera etapa y como banda propia durante dos décadas. Junto a su esposa Stella, radica en los Estados Unidos desde hace una década, y tuvieron dos hijos. Desde que pisó suelo norteamericano y dada su historia musical, fue convocado por una creciente congregación de Los Ángeles para coordinar el grupo de adoración. Hasta aquí, parece una historia normal, pero a partir de una experiencia con Dios, la vida familiar de los Allende dio un vuelco emocional, abriendo un mundo nuevo, el mundo de la adopción.

“Tenemos dos hijos, Destiny de 7 años y Ryder de 4 años”, cuenta Mariano. “Luego de que Ryder cumpliera su tercer año, junto con mi esposa decidimos adoptar. Nos recomendaron hacerlo a través del programa de Foster Home (Hogares de tránsito) con posibilidad de adopción, y fue así que hicimos todos los trámites para poder estar certificados como Foster Home a través del Estado y empezar a recibir niños. En octubre de 2024 recibimos una llamada en la que nos dieron la noticia acerca de un bebé de dos semanas de vida que había sido abandonado por su madre. El bebé tuvo que pasar sus primeras dos semanas de vida desintoxicándose en el hospital ya que la madre había consumido drogas durante todo el embarazo. Fue así que de un momento para otro nos encontramos con un recién nacido en nuestro hogar. Sin nombre, su nombre oficial era ‘baby boy’, así que desde el primer momento empezamos a orar para que Dios nos diera el nombre”. 

Aquellos días fueron una mezcla de sensaciones y los Allende tenían claro ese peculiar llamado a adoptar, aun sin estar seguros de cómo sería todo ese proceso. Buscando la guía de Dios, Mariano leyó Jeremías 1 y entendió el plan que Dios tenía para ese bebé. “Fue lo primero que vino a mi mente mientras oraba, ese pasaje en el que  Dios le dice a Jeremías ‘antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué’. Entendí que Dios tenía un plan para este bebé, que fue Él quien lo formó y le dio vida y que nosotros teníamos el privilegio de ser parte de ese plan. Así que lo llamamos Jeremy”.

La historia no termina ahí, sino que fue el comienzo de esta aventura musical que cobra sentido a partir de lo que vivió Mariano junto a su familia en el último año. “La canción ‘Antes que naciera’ refleja un momento de mi vida en el cual no veía con mis ojos lo que yo deseaba para mí”, subraya Mariano. Y agrega que “en ese entonces me encontraba soltero, mi papá había fallecido hacía poco tiempo. Ministerialmente me sentía estancado y muy lejos de mis sueños. Fue en ese momento que decidí confiar y rendirme completamente a Dios. Mis sueños, mis anhelos, todo. Y confiar sabiendo que Él tenía un plan, que Él me conocía desde antes de la fundación del mundo. Al igual que David en el Salmo 139, entendí que Dios sabe todas las cosas y que yo solo debía confiar en Él”, 

Si bien la canción había sido escrita antes del episodio de la adopción, este suceso le dio un sentido aún más profundo, y Mariano entendió, definitivamente, el lazo que unía ambas cosas. “Antes que naciera” es una balada testimonial, con una letra profunda e inspiradora.

“Antes que naciera” contó, además, con la ayuda de un viejo conocido suyo y de su padre, nada menos que Juan Carlos Fernández, “Rabito”, quien ayudó en el proceso de grabación de la misma, junto al productor Miguel “Bife” Provenzano. La canción fue grabada en español y en inglés y puede escucharse en plataformas y en emisoras de radio de toda América Latina y los Estados Unidos.

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